domingo, 28 de febrero de 2010

.. de luto por Chile

Hoy me uno a las oraciones por mi querido Chile,  donde parte mi corazón camina con ellos, fueron 7 años donde su hospitalidad hizo crecer una gran amistad. Es por este que este momento difícil de la historia, en que un nuevo reto de solidaridad se coloca adelante, estamos todos unidos para extender nuestra mano y decirles cuenten nosotros. 
Es triste mirar las calles por donde tantas veces camine, llenas de escombros; ver las iglesias donde oraba, con sus estructuras caídas, sentir la voz de mis amigos quebrada por la impotencia y el miedo. Hay que re-inventarnos, hay que renovar nuestra vida; como la tierra se ha sacudido. sacudamos  hoy nuestra vida.
Me uno a las palabras del Santo Padre en el rezo del "angelus" el día de hoy: "Mis pensamientos se dirigen también a Chile y a las personas afectadas por el terremoto, que causó numerosas pérdidas de vidas humanas y enormes daños. Rezo por las víctimas y estoy espiritualmente cerca de la gente para luchar en este momento de gran desastre, imploramos la ayuda de Dios en el sufrimiento y el coraje sobre la adversidad. Estoy seguro de que no dejará la solidaridad de muchos, especialmente las organizaciones de la iglesia".
Dios los acompaña, ayuda y sostiene. Mis oraciones son para ustedes y desearía tanto saber cada uno como se encuentran, sus familias, sus casas, y su ilusión. En este momento no podemos dejar de perder la esperanza, hoy más que nunca tiene que ser viva y positiva.
A todos los tengo muy presentes.

... la paciencia

Continuamos nuestro camino de confianza: Y descubrimos que la promesa levanta la esperanza: El que tiene fe, el que cree en la promesa, tiene también esperanza, una esperanza que no será confundida. Pero el que no cree no tiene otras aspiraciones que las terrenas, ni otro Dios que el vientre, ni otra gloria que sus vergüenzas, ni otro paradero que su perdición. Este tal, en vez de tener la auténtica esperanza que todo lo cambia, no tiene más que expectativas "razonables" que nada pueden cambiar.
Nuestra cuaresma es tener presente que la esperanza se realiza en la paciencia: Cuando Pedro quiere hacer tres chozas, no sabe lo que dice, pues ese lugar no es nada sin la cruz. Como no es nada la esperanza sin la paciencia. Esperar no es quedarse viendo visiones; pues soñando no se llega nunca al mundo soñado. Esperar no es instalarse "como si ya hubiéramos llegado", ni estar a la espera a ver lo que sucede. La transfiguración en el monte remite a los discípulos a la obediencia de la fe y al seguimiento de Jesús hasta que todo se cumpla: "Este es mi Hijo, el escogido, escuchadle". Cuando los discípulos vean de nuevo a "Jesús solo" y bajen del monte, deberán comprender que la esperanza se realiza en la paciencia, menos "gloriosa" pero más real que todas las visiones y utopías.
La paciencia es la esperanza de cada día, la tierra firme en la que se opera poco a poco la gran transformación y la cosecha a partir de un grano de trigo. Ni es la resignación de los que no han visto nada, de los que no han escuchado la promesa. Es la cruz, sin la cual todo quedaría en "visiones".
Anima tu esperanza con la paciencia, “Quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta” nos decia Santa Teresa.

sábado, 27 de febrero de 2010

... los "enemigos" palabra no cristiana

He estado hablando con diversas personas que me escriben y  compartiendo con unos y otros he llegado a la conclusión de que el odio más peligroso es el que nunca se expresa, el que parece haberse diluido en la bodega de nuestro inconsciente. Pero está ahí, pronto a devorar a otros y a devorarnos a nosotros mismos. El “odio” es siempre un territorio pendiente de evangelización en el amplio terreno de nuestra personalidad. 




El evangelio de Jesús llega hasta este terreno recondito. A los musulmanes, el amor a los enemigos les parece un precepto ético excesivo, reservado a unos pocos santos. A Gandhi, por el contrario, era lo que más le agradaba de Jesús. ¿Y a nosotros? 


No merece la pena insistir sobre la obligación cristiana de amar a los enemigos. Presentada así, como una obligación, resulta incomprensible y casi despreciable. El itinerario que Jesús propone es partir de la propia experiencia en relación con Dios. Nosotros somos amados por el Padre, incluso cuando hemos actuado como enemigos. Sobre nosotros ha salido cada día de nuestra vida el sol de un amor inmarcesible. ¿Quién se atreve a no amar a los enemigos cuando ha sido inundado por un amor que de ninguna manera merece? Jesús lo dice de otras muchas maneras: “A quien mucho se le perdona, mucha ama”. 

viernes, 26 de febrero de 2010

... las relaciones humanas

Dios toma partido, si hay discordia entre los hombres, la relación con Dios también se rompe, Dios no acepta las muestras de amor que queremos darle, cuando no amamos también a quienes son nuestros compañeros en este camino de confianza. Y la pobre ofrenda queda estacionada ante el altar…
Dios confía en nosotros, en nuestras relaciones humanas. Nos recuerda: Antes de mantener este diálogo de amistad conmigo, ve y reconcíliate con tu hermano. La caridad fraternidad esta sobre el culto. No se trata acá de un sentimentalismo fácil que evite verdaderas cuestiones. Ha habido una fisura. Se han disputado y ya no se hablan. No se trata tampoco de que el otro dé el primer paso, como suele decirse. “estoy dispuesto… cuando él quiera, por mi parte estoy listo”. Jesús, reconfirma, lo opuesto: es suficiente que yo me dé cuenta de que el otro tiene algo contra mí… debo yo ir a su encuentro, dar el primer paso.
¡Solamente así la ofrenda será agradable a Dios! Quizá no nos detendremos suficientemente en esta frase, creyendo que no se aplica a mi caso exactamente. ¿Estoy seguro que no debo a nadie alguna explicación?

jueves, 25 de febrero de 2010

... el diálogo de la amistad.

Jesús nos trae una gran novedad, una novedad que incluso para nuestro camino de confianza es completamente necesaria, una novedad que necesita de nosotros solamente la capacidad de ser amigos. Hoy Jesús nos invita a dialogar, a hacer oración.
Hacer oración no es simplemente hacer un monologo en nuestra vida, hacer oración es comunicarse, compartir, vivir en la amistad con Dios. Es saber que me dirijo a Aquel que me escucha.
La oración nos enriquece porque nuestra conversación se alimenta de la respuesta misma de Dios, haciendo una retroalimentación de nuestro compartir. Nosotros, hablamos con Dios, le contamos lo que nos sucede, lo que nos pasa, le pedimos peces, piedras, le compartimos nuestras miserias y nuestras limitaciones; Dios mismo, nos escucha y nos comparte incluso sus preocupaciones, nos comparte también su vida misma.
Pero la oración no solo queda en la dimensión hombre – Dios, sino que inmediatamente dirige su interés en nuestros compañeros de peregrinación, es nuestros compañeros de camino. Oración que no tiene sentido de caridad no es oración. Dios mismo se expresa, se manifiesta en el hermano y la hermana. Dios nos responde de diversa manera a nuestras preguntas y conversaciones.
Nuestro camino de confianza no puede ser efectivo  sino incluimos la oración para alentarnos, motivarnos e ir creciendo en esta lucha cotidiana, en esta amistad con Dios.

miércoles, 24 de febrero de 2010

... desde lo más profundo


En el momento más difícil de Jonás, en el oratorio submarino que se encontraba, desde allí invoca al Señor. Hoy puede ser ese día para nosotros, así mismo, cuando la vida parece estar en lo  más profundo porque ha llegado al nivel más bajo de las incomprensiones, de nuestras miserias, de nuestras tristezas, de nuestras desilusiones. Por eso mismo cuando nuestra vida se encuentra en la situación más baja, es ahí, donde nos encontramos en la situación adecuada para gritar al Señor. No es que Él quiera vernos mal para estar con nosotros, somos nosotros quienes cerramos nuestros sentidos para escuchar y solo los abrimos cuando estamos necesitados. Parece ser que estamos obligados a atravesar nuestros abismos para estar más sensibles a aquellos que nuestros hermanos y hermanas nos pueden enseñar.
Tenemos que dejar iluminar nuestras pobrezas para llevar nuestra vida, de lo profundo de nuestras contradicciones y ambigüedades, portándola a una conversión total. Necesitamos cambiar nuestro esteriotipo de vida y mirar el rostro de Jesús.
Solo quien se siente necesitado podrá requerir ayuda, aquel que siente que en soledad es capaz de continuar adelante, su camino de confianza no obrará en él. 

martes, 23 de febrero de 2010

... oración

Me siento tan confiado en Dios, escucho su Palabra y siempre viene la misma conclusión, somos una invitación a vivir en la confianza. La Palabra del Señor cumplirá su encargo.
Y es que, Dios es todo gratuidad. Eso no nos exime de hacer nuestra tarea; buscad, invocadlo, que no abandone, que regrese. Pero es Dios quien hace crecer, quien empapa, fecunda y hace germinar. A nosotros nos toca colaborar; hacer algo nuevo que empape la tierra de amor, de justicia, de bondad, de paz, de cercanía, de ternura, completando así su obra creadora.
Teniendo la certeza de que él sabe lo que necesitamos. Muchas veces no comprendemos el momento que nos toca vivir, sentimos que el Señor no pone yugos muy pesados y momentos muy difíciles; ¿cómo va a querer que suframos, si él es nuestro padre? Además, como dice hoy el salmo 33: “el Señor está cerca de los atribulados”
En el evangelio de hoy, Jesús nos enseña a orar. Orar, ¿cómo oramos? ¿cómo le hablamos a Dios, nuestro Padre? Mucho hay escrito sobre la oración, y muy bonito, y mucho o poco habremos leído sobre ello. Siempre recuerdo la historia de un campesino que llega a la iglesia y siempre hacia la misma oración que tenía en un papel, un día se le perdió el papel, llegó a la iglesia y recitó 2 abecedarios y al final le dijo al Señor “Organiza Señor las letras”. O Antonia, una mujer sencilla, decía el otro día: “yo entro en la Iglesia, me siento y le digo: ya sabes a qué vengo”. A veces empleamos demasiadas palabras.
La Palabra del Señor no volverá a él vacía. Y no es magia. Es fe.
En la oración nos relacionamos íntimamente con Dios, nuestro Padre. Y lo hacemos en un clima de abandono y confianza porque él conoce nuestras necesidades.
El gran deseo: venga tu reino. El Padrenuestro condensa nuestra vida cristiana, es la oración más recitada, pero que tanta falta nos hace encarnarla y vivirla. Pues, ánimo!

lunes, 22 de febrero de 2010

... servicio

Hoy celebraré la Eucaristía cerca a la tumba de San Pedro, dos elementos importantes en esta celebración: la ordenación diaconal de tres amigos y la fiesta de la Catedral del apóstol. Dos elementos que me invitan a reflexionar sobre mi servicio.
Estar en actitud de servicio es descubrir al otro, no que viene a pedir mi ayuda, sino a quien busco para ofrecerle lo que soy; no es simplemente como un ejecutivo de una multinacional, sino en nombre de Jesús; no es buscando una retribución, sino sintiéndome feliz porque la recompensa será grande en el cielo.
Ser servidor es entregarse, es darse a la comunidad, a la familia, al trabajo; ser servidor es tener fijos los ojos en quien impulsa nuestra vida, no en la paga terrena que seguramente se acaba; ser servidor es ser testimonio, elemento importante en este camino de confianza.
Hoy les pido oración por todos los pastores que, en nombre de Jesús, brindan su vida en el servicio a todos sin distinción. Pero, oremos también por quienes de diversa índole sirven como "servidores" en las diversas facetas de la vida cotidiana y nos ayudan a sentir a Jesús en todo momento.
Hemos sido llamados a "Servir", la Madre Teresa de Calcuta decía:"Quien no vive para servir, no sirve para vivir"

domingo, 21 de febrero de 2010

... nuestras tentaciones.

El hombre actual ansía vivir cada vez más, cada vez mejor, cada vez más intensamente. Pero, ¿vivir qué?, ¿vivir para qué? Se dice que estamos mejor equipados que nunca para vivir una vida sana y de mejor calidad. Pero, ¿qué es un hombre sano? ¿Qué es una vida de calidad humana? Hemos hecho la vida más larga, más cómoda y placentera, pero, ¿no la hemos hecho también más vacía, superficial y absurda? ¿Es éste el camino para satisfacer la necesidad profunda de vida que se encierra en el ser humano?
Hay además un hecho cultural sobre el que parece existir una conspiración de silencio y es que cada vez se medita menos sobre el sentido último de la vida. Desconectada de toda relación con el Creador, privada de destino trascendente, la vida del hombre contemporáneo se está convirtiendo en un episodio irrelevante que hay que llenar de bienestar y de experiencias placenteras.
Sin embargo, ¿es verdadero progreso entender y vivir la vida de manera tan rudimentaria y tan pobre de contenido, de horizonte y de sentido como lo hacen hoy no pocos hombres y mujeres?
Amigos, sentir a Dios, es sentir al hermano y la hermana, es caminar con él y ella para avanzar, para crecer juntos. Dios hoy en su evangelio nos invita a vencer la tentación del utilitarismo en busca del placer o del tener o del poder. Es dejar de ver al otro como un “tonto útil” que me sirve en mis proyectos y que lo desecho cuando incomoda mi vida.
El camino de confianza que hemos iniciado nos ayuda a realizar esa búsqueda constante de nuestras capacidades interiores, de nuestros talentos, de lo que inunda nuestra vida para vencer la tentación del egocentrismo y brindarlo en beneficio de todos y todas que lo necesitan.

sábado, 20 de febrero de 2010

... un gran desafío

Siguiendo el ejemplo de Jesús, que come en casa del publicano y le llama a ser su apóstol, hoy nos podemos preguntar cuál es nuestra actitud para con los demás: ¿la de Jesús, que cree en Mateo, aunque tenga el oficio que tiene, o la de los fariseos que, satisfechos de sí mismos, juzgan y condenan duramente a los demás, y no quieren mezclarse con los no perfectos, ni perdonan las faltas de los demás?
¿Somos de los que catalogan a las personas en «buenas» y «malas», naturalmente según nuestras medidas o según la mala prensa que puedan tener, y nos encerramos en nuestra condición de perfectos y santos? ¿Damos un voto de confianza a los demás? ¿Ayudamos a rehabilitarse a los que han caído, o nos mostramos intransigentes? ¿Guardamos nuestra buena cara sólo para con los sanos, los simpáticos, los que no nos crean problemas?
Ojala los que nos conocen nos pudieran llamar, como decía Isaías, «reparador de brechas, restaurador de casas en ruinas». O sea, que sabemos poner aceite y quitar hierro en los momentos de tensión, interpretar bien, dirigir palabras amables y tender la mano al que lo necesita, y perdonar, y curar al enfermo...
Es un buen trabajo en este camino de confianza para esta Cuaresma. Haremos bien en pedirle al Señor con el salmo de hoy: «Señor, enséñame tus caminos».

viernes, 19 de febrero de 2010

...ser sincero con uno mismo.

Hoy es el primer viernes de cuaresma, pocos días llevamos de nuestro camino de confianza, pero es bueno realizar una pequeño revisión de vida. No crean que ha sido fácil para mí. Me encuentro tan limitado y tan pecador. Los veo a ustedes y su generosidad de vida que me avergüenzo de mis acciones.
Es fácil señalar al otro, consideramos que no es problema si la causa de nuestro pecado las encontramos en el otro, es práctico enojarnos con quien nos dice una verdad sobre nuestra vida, pero por eso hoy, en este viernes cuaresmal, hago mi revisión de vida y descubro la gran necesidad de ser sincero conmigo mismo, de dejar las excusas y las justificaciones, de luchar por algo tan simple pero que, en ocasiones, se vuelve costumbre, debemos reconocer que lo más triste de este camino, es que somos nosotros mismos que nos engaños.
No es una tarea fácil, considero que es una batalla difícil, hay que saber enfrentarse y saber vivir este momento cuaresmal como una jornada de fortaleza en Dios que nos ama y acompaña. Nunca podremos olvidar que no estamos solos, en caso contrario nos ahogaríamos y nuestro proyecto naufragaría.
Estamos apenas iniciando el camino de confianza, estamos apenas dando nuestros primeros pasos en el reenamoramiento con Dios, dejemos de mirar para el lado en busca de justificaciones y reconozcamos en nuestro interior la necesidad de reconciliación.

jueves, 18 de febrero de 2010

Pequeños pasos para un camino

Hemos iniciado un camino, seguramente lo hemos recorrido tantas veces, hemos realizado tantos propósitos, y podemos llegar a sentir que no logramos lo que estamos esperando.
Te propongo otra cosa, vive este momento con confianza en Dios, dile a Él lo mucho que lo necesitas y reafirma lo importante que es en tu vida. De esta manera podemos iluminar nuestra vida de estudiantes, de trabajadores, de familia, cada área de nuestra existencia con su presencia. Recordando siempre que en el camino no estamos solos, Dios esta con nosotros.
Pero, para hacer más efectivo el camino pongámonos pequeñas metas, cada día lucha por alcanzar un pequeño objetivo, aceptar poco a poco la cruz de cada día. Sentir como podemos ir venciendo lo que nos aparta de Dios. Considero que lo más enriquecedor de este tiempo de Cuaresma es volvernos a reenamorar de nuestra vida de cristianos, es reconocer a un Amigo que nunca falla, que vive pendiente de nosotros, que intenta reconquistarnos cotidianamente. En una oración la Madre Teresa de Calcuta decía: Ayudanos Señor a aceptar las tristezas y las luchas que cada dia nos trae, domo de las ocasiones para crecer y de asemejarnos a ti”

miércoles, 17 de febrero de 2010

Untarse


“Untarse” no es solo la acción de mancharse, es la responsabilidad de interiorizar esa acción. Nos untamos de ceniza, nos comprometemos con aquello que nos untamos.
Ceniza tiene que dejar de ser un elemento de superstición para reafirmarse como signo de nuestro estado de conversión. El inicio de una etapa de reflexión marcada por el reconocimiento de nuestras miserias.
Conversión que implica la necesidad de reconquistar lo que hemos perdido, de desandar sobre aquellas situaciones que nos han alejado del Amor. Es un compromiso, una lucha, una batalla que implica de nuestra parte plantearnos una estrategia para lograr alcanzar nuestras metas, ideales y sobretodo la gracia de Dios.
Cuaresma es el tiempo del gozo, del sentir que nuestra vida es un caminar hacia la resurrección, pero igualmente, es la necesidad de vernos necesitados de Dios e incluso de nuestros hermanos para poder avanzar.
Teniendo presente nuestra meta, podemos “untarnos”.

martes, 16 de febrero de 2010

Ouchh, que realmente duele!. Mira, esta todo hinchado

Al parecer muchas veces nosotros tampoco hemos entendido que lo importante no está en la superficie. Jesús piensa en las dificultades que sus discípulos podían tener en el trato con aquellos que no entienden el mensaje del Evangelio y por el contrario van buscando obstaculizarlo; mientras los discípulos están preocupados por un poco de pan. 
Es necesario que aprendamos a ver y a apreciar lo que en realidad es importante. Esto es aplicable a todas nuestras situaciones de la vida y es, de hecho, la causa de muchos de nuestros problemas, el no saber distinguir en nuestra vida profesional, familiar, social, política o religiosa lo que es verdaderamente importante. La causa de este desorden es la falta de luz en nuestro corazón que nos hace ver las cosas de una manera muchas veces equivocada y darle peso a lo que no lo tiene y viceversa. 
Nuestra oración cotidiana es la fuente para que la luz de Dios ilumine siempre nuestro corazón y sepamos valorar rectamente todos los aspectos de nuestra vida. En ello está gran parte de nuestra felicidad y de la de los demás. No dejes tu oración… y el Espíritu conducirá tu vida y te hará reconocer lo que es verdaderamente importante y esencial en tu vida y lo que es superfluo e intranscendente..

lunes, 15 de febrero de 2010

Ante la dificultad

Las pruebas de la vida las deberíamos aceptar con elegancia espiritual, porque nos ayudan a purificarnos, a crecer en fe y a dar temple a nuestro seguimiento de Cristo. No se trata de que vayamos buscando sufrimientos, ni de que adoptemos una postura pasiva y resignada, sino de que ejercitemos nuestro aguante cuando vienen, sin exagerar posturas trágicas y depresivas. El salmo recoge este valor de las pruebas de nuestra vida: «Me estuvo bien el sufrir, así aprendí tus mandamientos; tus mandamientos son justos, con razón me hiciste sufrir». Desde luego, es difícil lo que pide Santiago: ¿quién llega a alegrarse de las pruebas de la vida?
Una de las cosas que más podemos pedir a Dios en nuestra oración es la verdadera sabiduría: «En caso de que alguno de vosotros se vea falto de acierto, que se lo pida a Dios». Cuántas veces en nuestra vida debemos tomar decisiones, personales y comunitarias, y experimentamos la dificultad de un buen discernimiento. Santiago nos invita, en estos casos y cuando nos vienen las pruebas, a orar con fe, sin titubear. Recordamos la escena de Pedro que se lanzó al agua para acercarse a Jesús, pero dudó y se empezó a hundir: le salió espontánea una oración breve y humilde: «Señor, sálvame».
Esta verdadera sabiduría la aplica la carta a un tema que se repetirá después: los ricos no tienen por qué estar demasiado orgullosos, porque no hay cosa más efímera que la riqueza. Santiago no duda en decir que el de condición humilde tiene una «alta dignidad», mientras que la del rico es una «pobre condición», al contrario de lo que este mundo insiste en decirnos; nos hace bien relativizar las cosas exteriores y llamativas.

domingo, 14 de febrero de 2010

"Dichosos..."

Alquien en el seminario me decía que las “Bienaventuranzas” son los mandamientos de los Evangelios. Las Bienaventuranzas suponen un cambio real de situaciones concretas que nos impulsan a tener un amor universal.
No es la exaltación de la pobreza, del hambre, del llanto o de la marginación. Es la cercanía de Dios a quienes, en su nombre, viven estas situaciones. Dios mismo  es quien las acompaña. Dios sacia sus necesidades, Dios le da sentido a sus búsquedas, en Él se encuentra el norte de la vida.
Igualmente, es un llamado de atención a quienes se sienten satisfechos, a quienes solo buscan las cosas de este mundo, a quienes se sienten bien usurpando al hermano, quitando el pan, haciendo entristecer o manipulando sus sentimientos. Ay de aquellos nos dice el Evangelio.
No quiere decir esto que los cristianos debamos considerarnos felices y fieles al  evangelio precisamente y sólo cuando alguien nos odia y nos persigue. Por desgracia,  también se nos puede odiar porque no somos como Dios manda y el evangelio que  predicamos nos exige. Ningún profeta, ningún testigo del evangelio, lo tiene fácil en un  mundo lleno de injusticias, puesto que tiene que denunciar la injusticia en todas partes. Pero nadie puede considerarse ya un profeta y un testigo de Cristo porque otros hablen  mal de él y lo persigan. En toda situación de conflicto nuestra obligación es examinar a  fondo nuestras conductas. Si nos persiguen sin motivo alguno o sólo porque somos  cristianos y hemos abrazado el evangelio y la causa de los pobres, podemos considerarnos  dichosos. Pero si no es así, seremos doblemente desgraciados.

sábado, 13 de febrero de 2010

LAS BEATITUDES DEL DIABLO


Satanás convocó una convención mundial de demonios. En su discurso de apertura dijo: "No podemos hacer que los Cristianos dejen de ir a la Iglesia. No podemos evitar que lean sus Biblias y conozcan la verdad. No podemos evitar que formen una relación íntima con su Salvador. Una vez que establecen esa conexión con Jesús, nuestro poder sobre ellos se pierde. Así que déjenlos asistir a sus Iglesias; déjenlos que tengan sus cenas familiares con platos y cubiertos, pero róbenles su tiempo, de manera que no tengan tiempo para desarrollar una relación con Jesucristo."

"Esto es lo que quiero que hagan", dijo el diablo. "Distráiganlos de querer obtener esa unión con su Salvador y de querer mantener esa conexión vital durante todo el día!"

"¿Cómo haremos eso?" gritaron sus demonios.

"Manténganlos ocupados en las nimiedades de la vida e inventen innumerables proyectos que ocupen sus mentes," respondió. "Tiéntenlos a gastar, gastar, gastar y prestar, prestar, prestar. Persuadan a las esposas para que vayan a trabajar por largas horas y a los esposos a trabajar 6-7 días cada semana, 10-12 horas al día, para que puedan costearse sus estilos de vida vacíos. ¡No dejen que pasen tiempo con sus hijos. A medida que sus familias se fragmenten, pronto, sus hogares no serán un escape a las presiones del trabajo!

Sobre-estimulen sus mentes para que no puedan escuchar esa pequeña voz. Tiéntenlos a que escuchen sus radios o reproductores siempre que conduzcan sus vehículos. A que mantengan constantemente encendidos, en sus hogares, su TV, VHS, CD´s y sus computadoras y asegúrense que en cada tienda y restaurante del mundo se toque constantemente música mundana. Esto atiborrará y romperá sus mentes y romperá esa unión con Cristo.

Llenen las mesas de centro con revistas y periódicos. Bombardeen sus mentes con noticias las 24 horas del día. Invadan los momentos en que conducen sus vehículos con noticieros. Inunden sus buzones de correo con correo basura, catálogos, rifas, y toda clase de boletines y anuncios ofreciendo gratuitamente productos, servicios y falsas esperanzas.

Pongan modelos bellas y delgadas en las revistas y en la TV para que sus esposos crean que la belleza exterior es lo que importa, y se sientan insatisfechos con sus esposas. Mantengan a las esposas demasiado agotadas para amar a sus esposos por la noche. ¡Denles dolores de cabeza también! Si ellas no les dan a sus esposos el amor que necesitan, ellos empezarán a buscar en otra parte. Eso fragmentará sus familias rápidamente!

Denles a Papá Noel para distraerlos de enseñarles a los niños el verdadero significado de la Navidad. Denles un conejo de Pascua para que no hablen sobre Su Resurrección y el poder sobre el pecado y la muerte.

Aún en sus horas de esparcimiento y distracción, háganlos que sean excesivos. Que regresen de divertirse agotados. Que estén demasiado ocupados como para poder salir a la naturaleza y reflexionar sobre la creación de Dios. Por el contrario, envíenlos a parques de diversión, eventos deportivos, obras teatrales, conciertos y al cine. Manténganlos ocupados, ocupados, ocupados!

Y cuando tengan reuniones de tipo espiritual, involúcrenlos en chismes y charlatanería para que salgan de allí con sus conciencias perturbadas. Atesten sus vidas con tantos interesantes motivos que no tengan tiempo para buscar el poder de Jesús. Pronto, estarán trabajando con sus propias fuerzas, sacrificando su salud y su familia por el bien de la causa. ¡Funcionará! ¡Funcionará!"

¡Era todo un plan! Los demonios se dispusieron animosos a sus tareas haciendo que los Cristianos en todas partes se volviesen más ocupados y tuviesen que hacer las cosas más a prisa, yendo de aquí para allá. Teniendo poco tiempo para su Dios o sus familias. Sin tiempo para hablar a otros acerca del poder de Jesús para cambiar sus vidas.

Creo que la pregunta es: ¿Ha tenido éxito el diablo con su plan? ¡Sé tú juez!

PD: Como dice Santa Teresa: "Quien no hace 15 minutos de Oración, no necesita demonio que lo tiente."

viernes, 12 de febrero de 2010

Los "sordomudos" actuales

Una parte esencial de la comunicación es hablar y escuchar. Quién lo hace se comunica y esta acción la podríamos realizar de dos maneras: verbal o no verbal. Por lo tanto comunicarse no implica solamente la expresión lingüística, sino también lo que por nuestras acciones realizamos, también ellas nos comunican.
Otro aspecto importante es que,  a pesar de que los avances tecnológicos con los cuales contamos hoy, estos nos llevan a tener tan rápida comunicación, pero se podría decir que cada día es menos eficaz. La comunicación existe para acercarnos, para poder interactuar, para reconocernos.
En estos dos aspectos en el Evangelio nos presenta a un sordomudo (Mc 7,31-37) un hombre que, seguramente, le era complicado comunicarse. Él experimentaba lo importante que es la comunicación, necesitaba de esta herramienta. Y por eso se acerca a Jesús.
¿Será que nosotros no seremos también sordomudos en nuestro entorno?, ¿será que no somos consciente de la necesidad de una verdadera comunicación? Miro mis acciones, miro mis falencias y de verdad descubro que a pesar que vivo en permanente comunicación este aspecto es un terreno que necesita mayor evangelización y necesitan más que nunca que Jesús nos alivie de la sordomudez.

jueves, 11 de febrero de 2010

Sentirnos marginados

¿Quién de nosotros no se ha sentido en alguna ocasión marginado o discriminado?, En el Evangelio de la mujer pagana (Mc.7,24-30) me admiro que en vez de sentirse ofendida o despreciada por las palabras tan fuertes de Jesús, lo que esta acción realiza en ella es fortalecer y motivarla a luchar por su objetivo, expresando una gran respuesta que es admirada por el mismo Señor.

En cuantas oportunidades nosotros en una situación similar la reacción sería de queja y reproche o simplemente sentarnos a juzgar la acción de las personas. ¿Será que esta actitud nos ayudará a sentirnos mejor? Hoy nos debemos plantear otra alternativa, desafiarnos a nosotros mismos, ser capaces de luchar por lo que queremos, de motivar nuestra vida a base de convicciones y compromisos. Nos hace tanta falta constancia.

Cuanta enseñanza en un pedazo del evangelio, Por un lado no desperdiciemos la gracia que Dios nos ha dado en nuestro bautismo y al tener como Dios a Jesús. Por otro lado no nos demos por vencidos en nuestras peticiones. No sabemos qué nos dará pero de seguro no nos dejará marcharnos con las manos vacías, sobre todo si somos capaces de reconocer con humildad lo que somos.

miércoles, 10 de febrero de 2010

El culpable

Es tan fácil echarle la culpa a los demás de las consecuencias de las acciones que realizamos, nos cuesta tanto asumir con responsabilidad el fruto de lo que hacemos. Hago memoria de una frase que un profesor este semestre me enseño sobre un dirigente: “Cuando las cosas van mal el mal dirigente mira por la ventana para ver quién es el responsable, cuando las cosas van bien el mal dirigente se mira en el espejo; con el buen dirigente las cosas son al revés”.

En esta etapa cultural en la cual vivimos es fácil encontrar muchos ejemplos de hombres y mujeres que viven con el estilo del “relativismo”: vivir mirándose el ombligo. Se agotan los compromisos, se acaban las responsabilidades, se pierden las realidades; relativizamos todo dependiendo mi gusto, mi punto de vista, mi interés.

Aunque el texto del evangelio nos habla directamente de la prohibición de comer algunos alimentos: “Nada que entre de fuera puede manchar al hombre” (Mc 7,13), hoy mi reflexión me motivó a pensar la cantidad de información que recibimos, la innumerable y agitada descarga de estímulos que percibimos, que en muchas ocasiones nos dirigimos a ellos como los culpables de nuestras determinaciones.

Pero el evangelio continua: “lo que sí lo mancha es lo que sale de dentro” (Mc 7,13), es lo que expulsamos, es lo que generamos luego que realizamos un proceso interno con la información que recibimos. Es posible que nosotros “creamos que”, “pensemos que” pero estas palabras no eximen de la responsabilidad a la cual estamos obligados a tener con nuestra vida y con nuestras decisiones.

Estamos acostumbrados a buscar en lo externo la causa de nuestro estado y es bueno darnos una revisada interior para descubrir que es lo que hay allí, para descubrir porque estamos como estamos. Tenemos que ser buenos dirigentes de nuestra existencia.

martes, 9 de febrero de 2010

"Hipócritas"

No puedo negar el grito interior con el cual resonó la palabra del evangelio: Hipócrita. La connotación con la cual llega trae consigo una fuerza que inquieta. Es fácil hablar de los escribas y fariseos de la época, pero es bueno mirarnos a nuestro interior si hoy en día no somos nosotros los que estamos siendo los “nuevos escribas y fariseos del mundo moderno”  que buscan poner sobre el hombro de los hombres cargas más fuertes que en muchas ocasiones no somos capaces de llevar o igualmente, siendo esto mucho mas complicado, intentamos acomodar los preceptos de Dios al beneplácito del mundo.

Dos dimensiones que piden de nosotros una justa medida, reconocerla es simplemente dejarnos llevar por el amor misericordioso de Dios. Siempre existirá la lucha entre la una y la otra, pero mirado a los ojos de ¿Qué haría Cristo en mi lugar? Podríamos encontrar una justa respuesta.

Hay algunos que dicen ser tan, pero tan de Iglesia, que prefieren eliminar a Cristo y su entrega por nosotros, en beneficio de las leyes y decretos. Existen también aquellos que dicen “seguir a Cristo” pero se aíslan de su comunidad. Somos hermanos, buscamos la misma meta, no somos hijos de uno o de otro, somos hijos del mismo Dios que, a precio de sangre, entrego Su Hijo por cada uno.  Dejemos a un lado la hipocresía y en el amor de Dios reactivemos nuestros lazos de hermandad que tanto bien nos hace a todos.

lunes, 8 de febrero de 2010

Tocarlo

Agradable poder encontrar este texto del evangelio de Marcos, sentir que la gente se acercaba a Jesús, compartía con Él, buscaban la manera de hacerse vecinos, cercanos. Pero existe un elemento que me llama la atención en mi reflexión, que al “tocarlo” quedaban curados.
Muchos pueden interpretar este momento como el simple hecho de extender la mano y tocarle su ropaje, yo lo miro un poco más allá. Cuando permitimos que nuestra vida “toque” la de Jesús.
Me he encontrado con la reflexión de que el Maestro se encuentra atento para tocar nuestro interior. Hoy refuerzo la afirmación con que hoy, el Señor quiere que nosotros hagamos nuestra parte y le acerquemos nuestro corazón para tocarlo.
Es la doble dimensión de los milagros de Jesús: la curación externa, de las enfermedades, de las limitaciones físicas, entre otras; que si solo se hablara de estas pasaría como un curandero más de su tiempo; pero el Señor habla también de otra curación y es la del interior, la que mueve la fuerza de nuestro corazón, que busca la felicidad, que orienta hacia la plena realización de la persona. Tanto la una como la otra Dios esta dispuesto a brindarnos. Hagamos nuestro esfuerzo y acerquémonos a tocarlo.

domingo, 7 de febrero de 2010

La red del pescador



Hablar de Pasión, es hablar de sensación, de sentimiento, de voluntad. Hablar de Pasión es hablar de la capacidad de emprender un camino que brota desde nuestra existencia, La pasión es la que ha movido a tantas mujeres y hombres para realizar y vencer en este camino de santidad. Me gusta mucho una palabra del evangelio de hoy: RED, me llama la atención este utensilio de los pescadores. La red envuelve, la red atrapa. Somos pescadores de hombres y necesitamos entonces tener una “red” para poder pescar. ¿Pero que clase de red es la que debemos de portar?
Una red que limita, que restringe, que obstaculiza, que hace un proceso de reducir la experiencia de Dios a un ritual de normas y cánones. O una red que envuelve para transportar corazones a una “barca”.
Ser pescadores de hombres nos pide el Señor para presentarlos a Él ya que nosotros somos su red.
Una red hecha con su entrega que entrecruza cada hilo que la compone, descubriendo las diferentes dimensiones, las diversas potencialidades, y los innumerables talentos que cada uno de nosotros, componente de esta red, comparte en bien de la misión.
Sabemos nuestras limitaciones pero nada de aquello que somos y, sobretodo, nada de aquello que no somos, tampoco podrá alejar de nosotros al Señor, para todos es la tarea grande de dejar que la gracia trabaje sin descanso para ir, día a día, cruzando nuestras vidas con la vida misma de Dios, así respondemos en el salmo: “Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo, y así concluirás en nosotros tu obra” (salm. 137).
Siempre es nuestra misión actualizar lo que el apóstol Pablo repite:”Hermano, hermana, la gracia de Dios no es estéril en ti” (1Cor. 15,10), dejate envolver por  la pasión de ser cristiano.

sábado, 6 de febrero de 2010

En memoria de mi hermano

Hoy mi reflexión no es la tradicional que he colgado esta semana en el blog, hace 13 años partió a la casa de Dios mi mejor amigo, Juancho. No saben la falta que me hace, sentir su apoyo, su amistad, su cercanía. Siempre que alcanzo un logro me imagino como estaría de orgulloso e igualmente cuando cometo un error recuerdo que era, con un corazón amoroso, el primero en recordármelo, pero también el que primero lo olvidaba. Recordar que las discusiones no duraban más que el tiempo en que hablábamos, porque luego continuamos nuestro amor como siempre. Como no agradecer hoy a Dios la posibilidad que me dio de tener la alegría de ser su hermano, su optimismo ante las situaciones mas adversas, la esperanza que inundaba nuestra familia y la preocupación constante por este “su hermanito”.
Hermanote, hoy hace 13 años has partido, pero continua siendo vigentes todos los momentos que vivimos juntos, los últimos momentos tan difíciles que vivimos. Nuestra madre mira tu retrato como si le hablaras, y la nostalgia de tu ausencia seguirá siempre presente en nuestro espacio.
Gracias Dios por el regalo de haberlo tenido como hermano, gracias Dios porque, por tu bondad, sé que él está a tu lado.

viernes, 5 de febrero de 2010

Tomar decisiones


Que difícil es tomar decisiones, pero soy un convencido que el éxito de la vida no es tomar las correctas, sería lo mejor, pero no es indispensable para ser feliz. Descubro a mucha gente atormentada por lo que pueden decir los brujos, magos o hechiceros sobre lo que les depara el futuro, muchos otros la primera parte que leen del diario es lo que se dice sobre su signo zodiacal. Digo para mí: “triste de aquellos”.
Seguramente esta joven muchacha que se arrima a su madre para pedirle un consejo (Mc.6,14), sería en el día de hoy una gran fanática de la lectura del tarot, o del cigarrillo o no se que otras cosas.
La vida es para vivirla, no para condicionarla, incluso en aquellos momentos en los cuales nos damos cuenta que nos hemos equivocado. Y esto por algunas sencillas razones:
-       Poder disfrutar, es bueno cuando vamos de viaje tener ganas de llegar, pero es genial sentir que puedo disfrutar del trayecto. No tengamos afán de arribar a conseguir este o determinada situación. Mira con alegría el momento que estas pasando.
-       Sentir la capacidad de maravillarse, cuando necesitamos urgentemente saber que sucederá mañana, sentir que todo tiene que ser perfecto, gastamos tantas energías en preocuparnos de lo que no debe suceder que olvidamos maravillarnos de lo que sucede.
-       Aprender de los errores, ser conscientes que aunque las cosas no vayan bien y lo esperado no resulte, siempre se aprende.
-       Equivocarse hace bien, saber que he cometido un error, ayuda a la humildad, a sentir que no somos más, ni menos que otros, que somos iguales de frente al amor de Dios.
-       Siempre sentir que Dios nos acompaña y no presiona mi libertad, solo esta a mi lado para sugerirme, motivarme, y prestarme su vida en mis días de dolor.
La vida es un regalo de Dios para disfrutar, para cantar, para alegrarnos, para cada día maravillarnos. ¿será que nos gusta vivir en la “muerte”?

jueves, 4 de febrero de 2010

Consejos


¿Qué consejo podría hoy dar? ¿qué es lo primordial? Hoy las lecturas nos reflejan dos personajes que aconsejan: David aconseja a su hijo Salomón y Jesús aconseja a sus discípulos.
Entre los dos consejos me resuenan tres palabras: agilidad, libertad y rigor. Agilidad para saber descubrir lo que conviene y lo que edifica, libertad para vivir desprendido y asumir cada desafío del ministerio y rigor para tener claridad sobre la meta que quieres alcanzar.
David le aconseja a Salomón:”ser fiel a la ley del Señor, tu Dios, caminando en su via” (1Re.2,3) y el Señor le pide a sus discípulos de no tener ningún temor durante su camino, ni siquiera el rechazo: “anden y quitar el polvo de sus pies” (Mc 6,11). Esta fuerza y esta audacia, dejan como herencia y consigna una conducta, permite a Salomón estar en el trono de su padre. Esta fuerza da a los discípulos la capacidad de predicar de manera que “la gente se convierta….” (Mc.6,12-13).
Entonces, ¿nosotros de que tenemos temor? Para nosotros también es el mandato evangélico  y el consejo de David: “Ten valor y se hombre” (1Re. 2,2). Vamos a realizar nuestra tarea.

miércoles, 3 de febrero de 2010

El asombro de Jesús

Jesús se “asombra” de nuestra incredulidad, Dios que es capaz de mirar todo con tanta naturalidad, se asombra de la incredulidad de quienes le seguían en ese momento, Asombrar es una palabra con una carga negativa, sus sinónimos son asustar, espantar; Jesús nos muestra una sensibilidad diversa y una gran vulnerabilidad.
Y hoy, en nuestras vidas, Jesús al vernos ¿se “asombraría”? ¿Qué tendría que decirnos frente a nuestro seguimiento?
En ocasiones nos llenamos de conocimiento intelectual que tiene la respuesta precisa frente a las diversas preguntas, somos expertos desde la teología, la filosofía u otras ciencias para decir la palabra adecuada, pero estamos de verdad abiertos a la intervención de Dios, o solo nos volvemos “expertos” en hablar de Él.
Pido a Dios que me ayude a que la reflexión de hoy entre en el profundo de mí corazón para saber renunciar a cada estilo de calculo, la capacidad de medir cada esfuerzo que hago con el fin de satisfacer mi necesidad personal, y abrir el corazón y la mente a lo verdadero, no aquello que vale por los números más por lo que habita en el corazón de Jesús. Es buscar el verdadero sentido de lo que es el Mesías para mí, lo que significa ser su ministro, para que el asombro se convierta en maravilla,  y no de la incredulidad sino en la realidad de mi vida.

martes, 2 de febrero de 2010

Nuestra Señora de la Candelaria, Ruega por Medellín

En varios lugares de Colombia, se rinde culto a la Virgen de la Candelaría, pero es en Medellín -ciudad de la cual es su Patrona con la denominación de "Nuestra Señora de la Candelaría"- don los fastos han cobrado notoriedad en las manifestaciones religiosas de ese país, ya que esa denominación y patronazgo fueron instituidos, nada menos por la Real Cédula de 22 de noviembre de 1674 expedida por la reina Maria Ana de Austria. Desde la fundación de Medellín, Nuestra Señora de la Candelaria "cubre con su manto el paso de las generaciones que han dejado su memoria como una estela de luz en el firmamento de la inmortalidad".

Es la fiesta patronal de la Arquidiócesisde Medellín. Bien podemos definir nuestra Iglesia Arquidiocesana como una “gran familia que tiene por madre a la Madre de Dios”. Ella, María, es a la vez modelo de discípula y auténtica misionera.

1.- Discípula.- En el Documento Final de la V ConferenciaGeneral del Episcopado Latinoamericano y del Caribe (APARECIDA),  se afirma que María  “por su fe (cf. Lc 1,45) y obediencia a la voluntad de Dios (cf. Lc 1,38), así como por la constante meditación de la Palabra y de las acciones de Jesús (cf. Lc 2,19.51), es la discípula más perfecta del Señor. Interlocutora del Padre en su proyecto de enviar su Verbo al mundo para la salvación humana, María con su fe, llega a ser el primer miembro de la comunidad de los creyentes en Cristo, y también se hace colaboradora en el renacimiento espiritual de los discípulos” (APARECIDA n.266)

2.- Misionera.-“Perseverando junto a los apóstoles a la espera del Espíritu (cf. Hch 1,13-14), cooperó con el nacimiento de la Iglesia misionera, imprimiéndole un sello mariano que la identifica hondamente. Como madre de tantos, fortalece los vínculos fraternos entre todos, alienta a la reconciliación y el perdón, y ayuda a que los discípulos de Jesucristo se experimenten como una familia, la familia de Dios. En María nos encontramos con Cristo, con el Padre y el Espíritu Santo, como así mismo con los hermanos.”(APARECIDA  n.267).

3.- Madre de la Iglesia.- Como en todas nuestras familias, también en esta gran familia que llamamos Iglesia, la madre es la que genera amor, ternura. Ella es modelo de humanidad, es verdadera autora de la unidad. Es muy importante meditar en la Iglesia como gran familia, por tanto no es una “empresa”, no es una pura organización de orden caritativo o benéfico. Lo que nos hace Iglesia es el hecho de haber recibido la gracia del Bautismo, es decir estamos recibiendo la vida divina que nos comunica Jesucristo el hijo de la Virgen María. Orientados por el ejemplo de María y por la fuerza de la gracia de Cristo, somos capaces de aprender a vivir como hermanos en una auténtica vida de solidaridad, de perdón, de reconciliación.

La imagen de Nuestra Señora que lleva en sus manos al Niño Dios cuando es presentado en el templo, ha de despertar en nosotros sentimientos de perdón, de reconciliación, de solidaridad. Será muy importante que al celebrar estas fiestas de Nuestra Señora de la Candelaria, que bien pudiéramos llamar también Nuestra Señora de la Luz, volvamos sentir la urgencia de acercarnos a Ella, la Madre de Jesús, para que nos haga comprender que somos también nosotros discípulos y misioneros y por lo tanto nos hemos de distinguir por los valores cristianos que animan nuestra existencia personal y social. Guardemos en nuestro corazón este interrogante: ¿como iluminamos la realidad de nuestra vida para avanzar por los caminos de la paz, el perdón, la reconciliación?